«Brunegilda, la valquiria toledana». ABC. 17 de julio de 2013. Consultado el 23 de juliol de 2021. Según este autor, la valquiria wagneriana de El anillo de los nibelungos está inspirada en la princesa visigoda Brunegilda, quien la tomó como modelo de un personaje del cantar de gesta medieval El Cantar de los nibelungos. Brunilda de Austrasia, llamada así porque llegó a ser reina en este estado, fue hija del rey visigodo Atanagildo, quien convirtió a Toledo en la capital de Hispania. Casada con el rey merovingio Sigeberto I de Austrasia, hubo de abandonar el Arrianismo para convertirse a la fe católica. Aparte de una sucesión de crímenes e intrigas, poco tiene que ver la biografía de Brunegilda de Toledo con el personaje del Cantar de los nibelungos, ya que Wagner toma y reinterpreta del mismo sus materiales literarios convirtiendo a la Brunegilda visigoda de buenos modales en una mujer aguerrida y salvaje. Solo el final de la Brunilda wagneriana en El ocaso de los dioses, la pieza final de la tetralogía, resulta igual de truculento que la muerte real de la reina Brunilda, torturada durante tres días y expuesta desnuda al escarnio de los soldados, hasta morir atada y arrastrada a la cola de un caballo.