Porcel G., Néstor; Tapia L., Octavio (1994). «Genocidio en Panamá». Revista Cultural La Lotería (Panamá) (Nº 399): 73-76. Archivado desde el original el 29 de septiembre de 2013. «El balance de pérdidas de vidas humanas se está perfeccionando y alcanzando las cifras reales. Sin embargo, testigos oculares con responsabilidad profesional señalan que al Hospital Santo Tomás ingresaron en los tres primeros días miles de heridos y por lo menos de allí hubo 600 muertos panameños, en el Seguro Social también atendieron a cientos de heridos que murieron por falta de medicinas y de la debida atención. Mas existe el informe de un encargado del Ministerio Público que hasta el domingo 24 de diciembre constató la existencia de más de 2.000 cadáveres provenientes de la invasión. Por ahora, el movimiento de los familiares de los desaparecidos representa a 200 de los 500 soldados que murieron en la pelea.»
c-span.org
The Panama Deception. 1992. Escena en 39:35. Consultado el 24 de enero de 2021. « The North Americans began burning down El Chorrillo at about 6:30 in the morning. They would throw a small device into a house and would catch on fire. They would burn a house and then move to another and begin the process all over again. They burned from one street to the next. They coordinated the burning through walkie-talkies.».
Porcel G., Néstor; Tapia L., Octavio (1994). «Genocidio en Panamá». Revista Cultural La Lotería (Panamá) (Nº 399): 73-76. Archivado desde el original el 29 de septiembre de 2013. «El balance de pérdidas de vidas humanas se está perfeccionando y alcanzando las cifras reales. Sin embargo, testigos oculares con responsabilidad profesional señalan que al Hospital Santo Tomás ingresaron en los tres primeros días miles de heridos y por lo menos de allí hubo 600 muertos panameños, en el Seguro Social también atendieron a cientos de heridos que murieron por falta de medicinas y de la debida atención. Mas existe el informe de un encargado del Ministerio Público que hasta el domingo 24 de diciembre constató la existencia de más de 2.000 cadáveres provenientes de la invasión. Por ahora, el movimiento de los familiares de los desaparecidos representa a 200 de los 500 soldados que murieron en la pelea.»