Garamone, Jim (2 de mayo de 2011). «Bin Laden Buried at Sea». NNS110502-22. American Forces Press Service. Archivado desde el original el 4 de marzo de 2012. Consultado el 2 de mayo de 2011.
No deja de sorprender cómo se ha naturalizado el asesinato y cómo se celebra(enlace roto disponible en este archivo).. Somos la Noticia. May 2, 2011. "No deja de sorprender cómo se ha naturalizado el crimen y el asesinato, y cómo se celebra. Antes, por lo menos los gobiernos imperiales guardaban la forma. Ahora la muerte de cualquier individuo, aparentemente de lo que se le acuse, pero no sólo de elementos fuera de la legalidad como Osama bin Laden, sino de presidentes, de las familias de presidentes, son abiertamente celebradas por los jefes de los gobiernos que bombardean."
Venezuela VP slams bin Laden 'murder', Washington Times May 2, 2011. "It surprises me to no end how natural crime and murder has become, how it is celebrated. At least before, imperial governments were more subtle. Now the death of anyone, based on what they are accused of, but not only those working outside of the law like bin Laden, but also presidents, the families of presidents, are openly celebrated by the leaders of the nations that bomb them."
Garamone, Jim (2 de mayo de 2011). «Bin Laden Buried at Sea». NNS110502-22. American Forces Press Service. Archivado desde el original el 4 de marzo de 2012. Consultado el 2 de mayo de 2011.
No deja de sorprender cómo se ha naturalizado el asesinato y cómo se celebra(enlace roto disponible en este archivo).. Somos la Noticia. May 2, 2011. "No deja de sorprender cómo se ha naturalizado el crimen y el asesinato, y cómo se celebra. Antes, por lo menos los gobiernos imperiales guardaban la forma. Ahora la muerte de cualquier individuo, aparentemente de lo que se le acuse, pero no sólo de elementos fuera de la legalidad como Osama bin Laden, sino de presidentes, de las familias de presidentes, son abiertamente celebradas por los jefes de los gobiernos que bombardean."
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Vyas, Kejal (2 de mayo de 2011). «Venezuela Official Condemns Celebrations». The Wall Street Journal. «[I]t is surprising how the crime and killing has become normal and was celebrated. Now the death of any individual, that has been accused–and not just elements outside the law like Osama bin Laden, but presidents, the families of a president–are openly celebrated by the heads of governments that bomb.»