El día ha sido fresco en Managua, una ciudad siempre caliente. Hasta el sol, inclemente, se ocultaba de vez en cuando, tal vez por pesar a esas 300 mil personas que esperaron desde temprano en la Plaza de la Fe, a orillas del Lago de Managua, la llegada de Ortega para que les hablara, ahora sí, como su nuevo Presidente de la República. http://www.elnuevodiario.com.ni/2007/01/10/nacionales/38441Archivado el 13 de enero de 2007 en Wayback Machine.
El día ha sido fresco en Managua, una ciudad siempre caliente. Hasta el sol, inclemente, se ocultaba de vez en cuando, tal vez por pesar a esas 300 mil personas que esperaron desde temprano en la Plaza de la Fe, a orillas del Lago de Managua, la llegada de Ortega para que les hablara, ahora sí, como su nuevo Presidente de la República. http://www.elnuevodiario.com.ni/2007/01/10/nacionales/38441Archivado el 13 de enero de 2007 en Wayback Machine.