Analysis of information sources in references of the Wikipedia article "Semanario insólito (programa de televisión)" in Spanish language version.
Caiga quien caiga, (C.Q.C) un noticiero humorístico, del mismo año y hecho por la misma productora [Cuatro Cabezas], comparte la estética, aunque se nutre también de modelos anteriores. Ya Semanario insólito (1982-1984) y La noticia rebelde (1986–1989) fueron exponentes de una tendencia menos acartonada, más zafada de hacer TV. Y los vincula también la mirada autorreflexiva y parodiante de la propia televisión que se instala en esos años.p. 12
Semanario Insólito fue durante los años de la apertura democrática el precursor del tratamiento en clave humorística de la actualidad en televisión. Conducido por Raúl Portal, Adolfo Castelo, Raúl Becerra y Virginia Hanglin (luego se sumaron Nicolás Repetto y Norberto Degoas, tras la salida de Portal, en diciembre de 1982), el ciclo combinaba noticias, espectáculos y humor, y se emitía semanalmente, los domingos. En este programa vieron la luz secciones que luego se popularizarían en la televisión, como la lectura y comentario de las revistas frívolas de actualidad.
La intención de mezclar actualidad y humor es un camino que, históricamente, está plagado de cadáveres televisivos. Tan atractiva como difícil de implementar "bien", la fórmula se ha devorado infinidad de proyectos que hoy yacen en el olvido, afortunadamente para sus impulsores. Por el contrario, un puñado de títulos ha marcado a fuego el género del periodismo humorístico, si es que cabe la expresión, a punto tal de constituir casi un continuo en el tiempo. Así, una línea imaginaria que nace en Semanario insólito (1982), sigue en La noticia rebelde (1986) y continúa con CQC (1995) ha mostrado y demostrado, en diferentes épocas y contextos, la eficacia del "género" cuando se hace con ideas y talento.
[...] No tanto porque hayan pasado 24 años, sino porque Semanario, más que un formato o un programa a recrear, fue un corte, un punto de inflexión, una irrupción, un revulsivo llamado a establecer las bases de buena parte del humor televisivo a futuro (La noticia rebelde, PNP, Caiga quien caiga, TVR). Semanario insólito fue novedad, sorpresa, descubrimiento, originalidad. Fue un insuperable disparador de estímulos capaz de sacudir la parálisis de una sociedad en los tramos finales de un tiempo terrible. Raúl Portal, Virginia Hanglin, Raúl Becerra y Adolfo Castelo, con talento, ideas e ingenio, obraron el milagro de que fuera concebible la idea de volver a pensar en sonreír [...] Siguió con una encuesta callejera (recurso que nació como género en aquel ciclo). [...]
[...] Con una idea que se entronca con el pionero Semanario insólito (1982) y se consolida con la no menos exitosa Noticia rebelde (1986) [...] Al igual que los mencionados antecesores (Semanario insólito y La noticia rebelde), no fueron los grandes ratings los que le dieron chapa histórica. [...]
Probablemente hoy, cuando la parodia y la autorreferencia homogenizan desde los noticieros hasta los programas políticos, resulte difícil creer que hubo un tiempo en que el periodismo y el humor no se mezclaban, al menos en televisión. Sí había, en cambio, una larga tradición en la prensa gráfica (de Caras y Caretas en adelante), y en la radio, pero hasta 1982, a nadie se le había ocurrido trasladar esa fórmula a la pantalla. [...][...] Inaugura un modo audaz e irreverente de abordar la actualidad, a través del humor, pero con una mirada crítica. Allí se popularizan las encuestas callejeras que le toman el pelo a la gente [...]
El programa fue también pionero en poner a los políticos en aprietos delante de una cámara, algo que aún hoy es el caballito de batalla de todos los que heredaron su estilo, desde El show de Videomatch hasta Caiga quien caiga. [...]
Pero la democracia, al contrario de lo que se hubiera esperado, no fue favorable al programa, que en 1983 se levantó del aire misteriosamente. Tuvieron que pasar tres años para que, en 1986, su espíritu fuera recuperado por La noticia rebelde, también por ATC. [...]
[...] Su primera aparición fue en 1983, como notero de Semanario insólito, el primer noticiero humorístico argentino. [...]
El puntapié inicial para que una emisión como La Noticia Rebelde saliera al aire fue el éxito de su antecesor: ‘Semanario Insólito’ (1982) el primer noticiero humorístico dsie la televisión argentina presentado en las pantallas del entonces canal estatal ATC (Argentina Televisora Color). Con una escenografía similar al noticiero de un canal y 4 desconocidos: Adolfo Castelo, Raúl Becerra, Raúl Portal y Virginia Hanglin, ‘Semanario insólito’ creó un nuevo modelo en la televisión.
Los jueces de la Sala V, Guillermo Rafael Navarro, Mario Filozof y Rodolfo Pociello Argerich, mencionaron la declaración de Gerardo Sofovich, uno de los creadores del programa “P.N.P.”, quien refirió expresamente que el programa “Televisión Registrada” no es una copia de “PNP”, por tratarse de dos formatos diferentes, vinculados únicamente por utilizar fragmentos de otros programas de televisión.
El debut del presentador fue en 1983 como notero de Semanario insólito, el primer noticiero humorístico local, por la entonces Argentina Televisora Color (ATC).
“Quien está comprometido con el éxito, pierde un poco de su derecho a la intimidad; y corre el riesgo -si así lo quiere interpretar- de caer en la deformación humorística, que sólo por excepción podría ser injuria”.
59.438 – CNCiv., sala H, febrero 15-2017. – C. y A. S.R.L. c. América TV S.A. y otros s/propiedad intelectual ley 11.723. (extracto)
Manifestaron que los cedentes idearon y registraron en 1987, la idea de que dentro de un programa de televisión se inserte un bloque estructurado sobre la base de un comentario satírico que tuviera por objeto criticar humorísticamente e ironizar acerca de diversos programas de televisión, desarrollando ideas esbozadas en programas anteriores de su autoría, como “La Noticia Rebelde” y “Semanario Insólito”. Que, a efectos de plasmar su idea, generaron una metodología de trabajo consistente en la selección de fragmentos de programas donde se hayan cometido errores, furcios, bloopers o situaciones graciosas, centrando la crítica en el tema de los pasajes seleccionados o en las vestimentas, dichos, actitudes, comentarios fuera de lugar, barbaridades o desconceptos que se hayan expresado en ellos, a través de una mecánica integrada por un preámbulo, donde se prepara el efecto humorístico perseguido mediante la presentación del fragmento seleccionado en tono sarcástico, irónico o ficticiamente serio. Luego, se pasaba a la nota, preparación necesaria, ya que el fragmento no es originariamente cómico, ni ha sido extraído de un programa cómico, todo ello seguido de un remate, en donde se expone la conclusión y comentario de lo mismo, en el mismo tono del preámbulo, produciéndose el efecto humorístico a raíz del contraste entre la presentación previa, la exhibición y el remate. La razón social actora adquirió el aspecto patrimonial de sus derechos de autor con fecha 11 de julio de 1996 por medio de dos escrituras públicas que individualizan, entre otras obras editadas e inéditas. Entienden que la obra que les pertenece fue copiada por varios programas mencionados en la demanda, entre ellos “Caiga quien caiga”, “Perdona nuestros pecados”, “Televisión registrada” y “El Ojo Cítrico”.
"La noticia rebelde" y "Semanario insólito", dos ciclos que al mezclar humor y actualidad marcaron una nueva forma de hacer televisión en Argentina [...]
Carnevale, Susana (1999). La Patria Periodística. Ediciones Colihue. ISBN 950581979X. Consultado el 12 de mayo de 2019.Recién a las 22,10, el jefe de prensa del Ministerio del Interior, Raúl Portal, confirmó la noticia de la clausura.
[...] De hecho, “Semanario Insólito” fue prohibido por los militares. Pero Raúl se había ido antes porque se había peleado a sillazos con Raúl Becerra y Adolfo Castelo, por desinteligencias ideológicas. Me acuerdo muy bien porque yo era la única dama del grupo.
La Justicia determinó ayer que "Televisión Registrada" es una copia del formato e idea del programa televisivo "Perdona Nuestros Pecados" (PNP), por lo que dispuso el procesamiento del productor Diego Gvirtz por el delito de "plagio" y trabó embargo sobre sus bienes por la suma de cien mil pesos, se informó oficialmente en Tribunales. [...]
[...] Los cinco programas que menos duraron en televisión, que estuvo conformado por Chicas de la calle, conducido por Verónica Lozano y Anita Martínez, con quince emisiones al aire; El llamado final con Soledad Pastorutti que duró siete programas; Semanario episodio 2, con seis programas al aire; Blef con Diego Korol y sus tres días en la pantalla de Canal 13 y el récord absoluto: A todo culorr, con Alfredo Casero y Leticia Brédice, quienes permanecieron sólo un día al aire. [...]
(extractos de entrevista realizada a Gastón Portal –hijo de Raúl– por Mario Carlón, doctor en Ciencias Sociales por la Universidad de Buenos Aires y Licenciado en Historia del Arte por la Universidad Nacional de Plata)
Un programa absolutamente revolucionario. La programación de hoy le debe mucho más de lo que se imagina a Semanario insólito. Fue el puntapié inicial para todo un estilo de televisión que sigue con La noticia rebelde, Caiga Quien Caiga, Televisión Registrada y un montón de programas de los nuestros, como Televicio y algunas cosas de Perdona Nuestros Pecados. Era una mirada irónica sobre los medios y la realidad. Fue quizás el programa que empezó a sacarle la naftalina a los medios. Que los medios no eran sagrados.En realidad yo no separo mucho a Semanario insólito de La noticia rebelde porque a La noticia rebelde la veo más como una continuidad. La diferencia es que La noticia rebelde duró cuatro años, por lo tanto, se asentó. Pero es la misma semilla. Y CQC es una renovación de Semanario insólito y La noticia rebelde, sin duda, y asumido de alguna manera por ellos mismos.
[...] Ah, y ojo, porque en Semanario insólito empezó “Pasando revista”, no en La noticia rebelde. “Pasando revista” lo hacía Castelo con mi viejo en Semanario insólito... Y también, por ejemplo, invitaban a un montón de invitados a un living enorme, invitados muy importantes, no sé como hacían, lo que pasa es que no existía la costumbre de invitar a tanta gente y como era raro iban, —me acuerdo que se enojó mucho Karadagian una vez— y entonces durante cinco minutos le preguntaban el nombre, algo así... y entonces decían “Bueno, se nos acabó el tiempo, nos vamos al corte, muchas gracias por haber venido” y nadie había hablado, y Karadagian no entendió el chiste y se volvió loco.
59.438 – CNCiv., sala H, febrero 15-2017. – C. y A. S.R.L. c. América TV S.A. y otros s/propiedad intelectual ley 11.723. (extracto)
Manifestaron que los cedentes idearon y registraron en 1987, la idea de que dentro de un programa de televisión se inserte un bloque estructurado sobre la base de un comentario satírico que tuviera por objeto criticar humorísticamente e ironizar acerca de diversos programas de televisión, desarrollando ideas esbozadas en programas anteriores de su autoría, como “La Noticia Rebelde” y “Semanario Insólito”. Que, a efectos de plasmar su idea, generaron una metodología de trabajo consistente en la selección de fragmentos de programas donde se hayan cometido errores, furcios, bloopers o situaciones graciosas, centrando la crítica en el tema de los pasajes seleccionados o en las vestimentas, dichos, actitudes, comentarios fuera de lugar, barbaridades o desconceptos que se hayan expresado en ellos, a través de una mecánica integrada por un preámbulo, donde se prepara el efecto humorístico perseguido mediante la presentación del fragmento seleccionado en tono sarcástico, irónico o ficticiamente serio. Luego, se pasaba a la nota, preparación necesaria, ya que el fragmento no es originariamente cómico, ni ha sido extraído de un programa cómico, todo ello seguido de un remate, en donde se expone la conclusión y comentario de lo mismo, en el mismo tono del preámbulo, produciéndose el efecto humorístico a raíz del contraste entre la presentación previa, la exhibición y el remate. La razón social actora adquirió el aspecto patrimonial de sus derechos de autor con fecha 11 de julio de 1996 por medio de dos escrituras públicas que individualizan, entre otras obras editadas e inéditas. Entienden que la obra que les pertenece fue copiada por varios programas mencionados en la demanda, entre ellos “Caiga quien caiga”, “Perdona nuestros pecados”, “Televisión registrada” y “El Ojo Cítrico”.
Los jueces de la Sala V, Guillermo Rafael Navarro, Mario Filozof y Rodolfo Pociello Argerich, mencionaron la declaración de Gerardo Sofovich, uno de los creadores del programa “P.N.P.”, quien refirió expresamente que el programa “Televisión Registrada” no es una copia de “PNP”, por tratarse de dos formatos diferentes, vinculados únicamente por utilizar fragmentos de otros programas de televisión.
En esta década surgieron algunos géneros que después se consolidarían como ‘Semanario Insólito’ o ’La noticia rebelde’, que fueron iniciadores en el periodismo humorístico.
"Llegó la televisión. Llegó... Semanario Insólito", era la frase que abría los domingos a las 20.30 un programa que marcó la historia de la TV argentina. Raúl Becerra, Raúl Portal y Adolfo Castelo integraban el equipo. Portal se fue pocos meses después para hacer "Misteriodismo", que era, según Castelo, "una mala imitación". En la sección "Pasando revista" (imitada hasta el infinito) revoleaban ejemplares de "Gente" y "Siete Días", entre otras, luego de leer temas y coberturas que ellos consideraban desechables. Ese revoleo era rematado siempre por un estentóreo "¿A quién le importa esto?". Tenían avisos truchos y móviles inexistentes: "Aquí no está ocurriendo absolutamente nada y somos el único medio presente", apostillaban a los televidentes.
Ocho días después de que el general Mario Benjamín Menéndez pusiera sus pies en las islas, el 10 de abril de 1982, salía al aire Semanario insólito, el primer ciclo periodístico de humor de la televisión argentina, cuya influencia aún persiste. Desde Caiga quien caiga hacia atrás, la huella de S.I. resulta fácilmente identificable. Aunque no parezca posible nunca antes periodismo y humor habían cruzado sus caminos, al menos en televisión. Y si eventualmente lo hicieron, fue en circunstancias específicas y poco espontáneas.Autorreferencias periodístico-televisivas; la impagable sección “Pasando revista” (imitada hasta el infinito a partir de S.I.) en la que terminaban revoleando por los aires ejemplares de Gente, Siete Días y otras; publicidades truchas, móviles inexistentes (“aquí no está ocurriendo absolutamente nada y somos el único medio presente”, informaban Castelo y Becerra desde una esquina cualquiera de Buenos Aires) y otras maravillas tomaron desprevenida a una audiencia que venía sufriendo el accionar de la televisión de la guerra.
Salvando diferencias tecnológicas, Semanario Insólito mostraba una estética similar a las que hoy exhiben los ciclos del mismo género. Un atril para cuatro conductores, fondo de ciudad y espacios para secciones espaciales. Otro detalle original, los “pases” a exteriores los daban ellos (por lo que el trabajo de los móviles debían ser inexorablemente grabados) y cometían, con absoluta gracia, un pecado televisivo imperdonable: se presentaban a sí mismos: “–Adelante Adolfo”, recitaba Castelo en estudios. “–Gracias Adolfo”, respondía el propio locutor de cabellera blanca en algún punto de la ciudad. El grado de estudiada incoherencia llegaba al paroxismo cuando Hanglin hacía lo propio en el momento del corte: “–Adelante corte comercial”, para ir a tanda y “–Gracias corte comercial”, cuando regresaban de ella.
La primera imagen que recuerdo de Nicolás Repetto pertenece a "Semanario Insólito", un magazine semanal de principios de los 80 en la pantalla del viejo y glorioso Canal 7 conducido por Raúl Portal, Virginia Hanglin, Nicolás Becerra y Adolfo Castelo. En plenas vacaciones de verano, los capos se fueron a Mar del Plata y dejaron a un movilero a cargo de la sucursal B.A., ciudad en la que no pasaba absolutamente nada y en la que este personaje inventó la sección Deportes Para Ejecutivos Con Poco Tiempo. Con paraguas (llovía a cántaros) y micrófono en mano, el muchacho se tiró desde el trampolín más alto de Parque Chacabuco, después puso la imagen en reversa (volvía desde el agua a estar arriba del trampolín) y terminaba dándoles consejos a los yuppies sin tiempo.
En esta década surgieron algunos géneros que después se consolidarían como ‘Semanario Insólito’ o ’La noticia rebelde’, que fueron iniciadores en el periodismo humorístico.
En 1982 aparece Semanario insólito. Se trata de una parodia del noticiero televisivo que eleva eventos ridículos e insignificantes a la categoría de acontecimiento periodístico. Esa mezcla de noticiero y programa cómico se afianza con La noticia rebelde (1986-1989) y continúa reproduciéndose en programas que acentúan el componente periodístico de opinión como Caiga Quien Caiga (1995-2014) o el de lo cómico, manteniendo la entrevista en un lugar central; Sin red (1988), Notishow (1988) y Penúltimo momento (1988-1989) son ejemplos de ello.p. 112
Kaufman, Guillermo (2010). Procedimientos narrativos, verosimilitud y estrategias ficcionales en los géneros de no ficción televisivos argentinos actuales (PDF). Facultad de Periodismo y Comunicación Social, Universidad Nacional de La Plata. Consultado el 12 de mayo de 2019.Entre 1982 y 1983, se emitió Semanario insólito (canal 7), una parodia humorística de los noticieros y de los programas periodísticos del período [...] El programa incluía encuestas realizadas en la calle, a la manera de los ciclos que vengo mencionando, pero orientadas a la burla hacia la propia gente, incluso a través de una postproducción que favorecía el escarnio de los actores sociales, como posteriormente realizarían Videomatch a través de las cámaras ocultas y Caiga quien Caiga. La reflexividad que construía el programa a través del humor constituyó un desfase respecto de la metatelevisión posterior, a la vez que denunció la cristalización y cierto agotamiento de la modalidad interactiva de esta etapa, sosteniendo una crítica al atractivo que podía revestir la permanente interpelación de los actores sociales (tal vez demasiados cotidianos) investidos a menudo de una idealización no exenta de falso interés y populismo.
(extractos de entrevista realizada a Gastón Portal –hijo de Raúl– por Mario Carlón, doctor en Ciencias Sociales por la Universidad de Buenos Aires y Licenciado en Historia del Arte por la Universidad Nacional de Plata)
Un programa absolutamente revolucionario. La programación de hoy le debe mucho más de lo que se imagina a Semanario insólito. Fue el puntapié inicial para todo un estilo de televisión que sigue con La noticia rebelde, Caiga Quien Caiga, Televisión Registrada y un montón de programas de los nuestros, como Televicio y algunas cosas de Perdona Nuestros Pecados. Era una mirada irónica sobre los medios y la realidad. Fue quizás el programa que empezó a sacarle la naftalina a los medios. Que los medios no eran sagrados.En realidad yo no separo mucho a Semanario insólito de La noticia rebelde porque a La noticia rebelde la veo más como una continuidad. La diferencia es que La noticia rebelde duró cuatro años, por lo tanto, se asentó. Pero es la misma semilla. Y CQC es una renovación de Semanario insólito y La noticia rebelde, sin duda, y asumido de alguna manera por ellos mismos.
[...] Ah, y ojo, porque en Semanario insólito empezó “Pasando revista”, no en La noticia rebelde. “Pasando revista” lo hacía Castelo con mi viejo en Semanario insólito... Y también, por ejemplo, invitaban a un montón de invitados a un living enorme, invitados muy importantes, no sé como hacían, lo que pasa es que no existía la costumbre de invitar a tanta gente y como era raro iban, —me acuerdo que se enojó mucho Karadagian una vez— y entonces durante cinco minutos le preguntaban el nombre, algo así... y entonces decían “Bueno, se nos acabó el tiempo, nos vamos al corte, muchas gracias por haber venido” y nadie había hablado, y Karadagian no entendió el chiste y se volvió loco.
Semanario Insólito fue durante los años de la apertura democrática el precursor del tratamiento en clave humorística de la actualidad en televisión. Conducido por Raúl Portal, Adolfo Castelo, Raúl Becerra y Virginia Hanglin (luego se sumaron Nicolás Repetto y Norberto Degoas, tras la salida de Portal, en diciembre de 1982), el ciclo combinaba noticias, espectáculos y humor, y se emitía semanalmente, los domingos. En este programa vieron la luz secciones que luego se popularizarían en la televisión, como la lectura y comentario de las revistas frívolas de actualidad.
Ocho días después de que el general Mario Benjamín Menéndez pusiera sus pies en las islas, el 10 de abril de 1982, salía al aire Semanario insólito, el primer ciclo periodístico de humor de la televisión argentina, cuya influencia aún persiste. Desde Caiga quien caiga hacia atrás, la huella de S.I. resulta fácilmente identificable. Aunque no parezca posible nunca antes periodismo y humor habían cruzado sus caminos, al menos en televisión. Y si eventualmente lo hicieron, fue en circunstancias específicas y poco espontáneas.Autorreferencias periodístico-televisivas; la impagable sección “Pasando revista” (imitada hasta el infinito a partir de S.I.) en la que terminaban revoleando por los aires ejemplares de Gente, Siete Días y otras; publicidades truchas, móviles inexistentes (“aquí no está ocurriendo absolutamente nada y somos el único medio presente”, informaban Castelo y Becerra desde una esquina cualquiera de Buenos Aires) y otras maravillas tomaron desprevenida a una audiencia que venía sufriendo el accionar de la televisión de la guerra.
Salvando diferencias tecnológicas, Semanario Insólito mostraba una estética similar a las que hoy exhiben los ciclos del mismo género. Un atril para cuatro conductores, fondo de ciudad y espacios para secciones espaciales. Otro detalle original, los “pases” a exteriores los daban ellos (por lo que el trabajo de los móviles debían ser inexorablemente grabados) y cometían, con absoluta gracia, un pecado televisivo imperdonable: se presentaban a sí mismos: “–Adelante Adolfo”, recitaba Castelo en estudios. “–Gracias Adolfo”, respondía el propio locutor de cabellera blanca en algún punto de la ciudad. El grado de estudiada incoherencia llegaba al paroxismo cuando Hanglin hacía lo propio en el momento del corte: “–Adelante corte comercial”, para ir a tanda y “–Gracias corte comercial”, cuando regresaban de ella.
59.438 – CNCiv., sala H, febrero 15-2017. – C. y A. S.R.L. c. América TV S.A. y otros s/propiedad intelectual ley 11.723. (extracto)
Manifestaron que los cedentes idearon y registraron en 1987, la idea de que dentro de un programa de televisión se inserte un bloque estructurado sobre la base de un comentario satírico que tuviera por objeto criticar humorísticamente e ironizar acerca de diversos programas de televisión, desarrollando ideas esbozadas en programas anteriores de su autoría, como “La Noticia Rebelde” y “Semanario Insólito”. Que, a efectos de plasmar su idea, generaron una metodología de trabajo consistente en la selección de fragmentos de programas donde se hayan cometido errores, furcios, bloopers o situaciones graciosas, centrando la crítica en el tema de los pasajes seleccionados o en las vestimentas, dichos, actitudes, comentarios fuera de lugar, barbaridades o desconceptos que se hayan expresado en ellos, a través de una mecánica integrada por un preámbulo, donde se prepara el efecto humorístico perseguido mediante la presentación del fragmento seleccionado en tono sarcástico, irónico o ficticiamente serio. Luego, se pasaba a la nota, preparación necesaria, ya que el fragmento no es originariamente cómico, ni ha sido extraído de un programa cómico, todo ello seguido de un remate, en donde se expone la conclusión y comentario de lo mismo, en el mismo tono del preámbulo, produciéndose el efecto humorístico a raíz del contraste entre la presentación previa, la exhibición y el remate. La razón social actora adquirió el aspecto patrimonial de sus derechos de autor con fecha 11 de julio de 1996 por medio de dos escrituras públicas que individualizan, entre otras obras editadas e inéditas. Entienden que la obra que les pertenece fue copiada por varios programas mencionados en la demanda, entre ellos “Caiga quien caiga”, “Perdona nuestros pecados”, “Televisión registrada” y “El Ojo Cítrico”.