Parolin, Gianluca P. (2009). Citizenship in the Arab World: Kin, Religion and Nation-State. p. 30. ISBN978-9089640451. «Los árabes arabizados, por el contrario, se cree que son descendientes de Ismael a través de Adnan, pero en este caso la genealogía no coincide exactamente con la línea bíblica. La denominación de arabizado se debe a la creencia de que Ismael hablaba hebreo hasta que llegó a La Meca, donde se casó con una mujer yemení y aprendió árabe. Ambas líneas genealógicas se remontan a Sem, hijo de Noé, pero solo los adnanitas pueden reclamar a Abraham como su ascendente, y el linaje de Mahoma, el Sello de los Profetas (khatim al-anbiya'), por lo tanto, se remonta a Abraham. La historiografía contemporánea reveló la falta de coherencia interna de este sistema genealógico y demostró que no encuentra suficientes pruebas coincidentes; Incluso se cree que la distinción entre qahtanitas y adnanitas es un producto de la era omeya, cuando la guerra de facciones (al-niza al-hizbi) estaba en su apogeo en el joven Imperio Islámico».