Hobsbawm, Eric J. (2000). Historia del siglo XX, 1914-1991 (Jordi Ainaud, trad.). Grupo Planeta (GBS). p. 30. ISBN8484320421. «Comenzó como una guerra esencialmente europea entre la Triple Alianza, constituida por Francia, Reino Unido y el Imperio ruso, y los llamados «Imperios Centrales» (Imperio alemán y el Imperio austrohúngaro). El Reino de Serbia y Bélgica se incorporaron inmediatamente al conflicto como consecuencia del ataque austriaco contra la primera y del ataque alemán contra la segunda (que era parte de la estrategia de guerra alemana). El Imperio otomano y el Reino de Bulgaria se alinearon poco después junto a las potencias centrales, mientras que en el otro bando la Triple Alianza dejó paso gradualmente a una gran coalición. Se compró la participación del Reino de Italia y también tomaron parte en el conflicto Reino de Grecia, Reino de Rumanía y, en menor medida, Portugal. Como cabía esperar, el Imperio de Japón intervino casi de forma inmediata para ocupar posiciones alemanas en el Extremo Oriente y el Pacífico occidental, pero limitó sus actividades a esa región. Los Estados Unidos entraron en la guerra en 1917 y su intervención iba a resultar decisiva.»